Las mordeduras de serpientes en las zonas más vulnerables de México siguen siendo un reto para la salud pública.
Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) desarrollaron un antídoto contra serpientes venenosas como cobras, mambas y rinkhals mediante biotecnología.
Es decir, es un antiveneno basado en nanocuerpos, diseñados y mejorados en el laboratorio a partir de anticuerpos de llamas y alpacas.
Los beneficios de esta nueva tecnología son que reducirá el daño tisular y la necrosis local, y podría ser más segura, eficaz y accesible que los métodos tradicionales.
Como los anticuerpos se producen en laboratorio, sin necesidad de animales inmunizados, la fabricación futura podrá llevarse a cabo sin el uso de animales escalable y con calidad uniforme, lo que también facilitaría productos más económicos.
La gran mayoría de los Estados miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS)…
En Oaxaca, los jóvenes Zoques se disfrazan de “huehues” (viejos) y “queman” el año viejo…
Los fondos rocosos de las islas Canarias han sufrido una profunda transformación con la mortalidad…
Las mañanas en CDMX serán las protagonistas del frío: se esperan temperaturas entre 1 y…
Descubrieron que la estructura del microbioma intestinal puede acelerar la esclerosis múltiple. El equipo de…
Mantenerse hidratado es clave para el bienestar diario, y cada vez más personas buscan bebidas…